Desalar el bacalao previamente.
En una cazuela poner un buen chorro de aceite, picar la cebolla y el pimiento en trozos pequeños. Añadir a la cazuela y dejar pochar a fuego bajo.
Cuando la cebolla esté transparente añadir el diente de ajo picado muy pequeño, la cayena y la carne de mejillón(la cantidad la que tu prefieras). Dejar pochar todo 10 minutos.
Verter la harina, remover y acto seguido el vino blanco. Poner a punto de sal la salsa y si la salsa está muy espesa añadir un poco de agua o caldo de pescado o si has cocido los mejillones y sacado su carne, usa el caldo del mejillón, yo si puse un poco de agua.
Colocar los lomos de bacalao y dejar hacer por los dos lados unos minutos( poner la tapa de la cazuela y a fuego medio) hasta que las lacas se separen ellas solas.
La salsa queda deliciosa y le da un sabor al bacalao muy rico, ese toque picante le va genial. A nosotros nos gusta el bacalao en su punto (poco hecho) pero eso ya va en gustos. Yo suelo dejar hacer unos 4 minutos por cada lado y si es muy gordo 5 minutos.